Seres inteligentes no humanos

El Universo es mucho más complejo de lo que nosotros creemos y solamente percibimos algo de su realidad, es decir la realidad, fundamentalmente material, que nos permite sobrevivir en nuestro planeta como individuos y como especie. Pero, sabemos que en el Cosmos no solamente hay materia sino también energía; y sabemos que la materia es una especie de energía congelada como consecuencia del progresivo enfriamiento del Universo a partir del "big-bang"; y sabemos que, además de la materia y de la energía normales, existen “una materia y una energía oscuras” invisibles y misteriosas que se han descubierto no hace mucho. Por lo tanto, es sensato pensar que, aunque el hombre, poco a poco, va descubriendo misterios del Universo, le queda aún mucho por descubrir de la realidad de éste y es posible que nunca lo llegue a comprender del todo. Cada animal de nuestro planeta, pongamos por caso, está adaptado a un determinado ambiente y tiene unos determinados sentidos que le permiten percibir los aspectos de la realidad que tienen un valor de supervivencia óptimo para él. No es lo mismo, por ejemplo, la realidad que percibe una hormiga que la realidad que percibe un hombre; la realidad es diferente para ambos y es más completa de lo que ambas especies puedan percibir.

 Teniendo en cuenta todo lo escrito, podemos pensar que en el Cosmos existen varios niveles existenciales de seres que no tienen que ser precisamente materiales y por lo tanto no los podemos percibir; y estos seres pueden ser inteligentes y más que nosotros. Me refiero a seres que siempre han aparecido en las leyendas y religiones de todos los pueblos de la humanidad desde tiempos muy antiguos: Aquí estarían los dioses, los ángeles, los demonios, los espíritus, las hadas… y, en nuestros tiempos, los aliens, con toda su diversidad. Y estos seres inteligentes no humanos, muy diversos y con diferentes grados de inteligencia y de estructura existencial, podrían ser terrestres, es decir, la Terra es también su planeta, y extraterrestres (dioses y aliens que nos visitan procedentes de otros lugares del cosmos). También podrían pertenecer a nuestra dimensión existencial o pertenecer a otras dimensiones, sean terrestres o extraterrestres. Y también podrían ser seres materiales o seres hechos de ondas energéticas que nosotros no percibimos (¿espírituales?). Y además varios de estos seres, muy evolucionados, podrían pasar de ser espirituales a materiales o al revés, y podrían pasar de un plano o dimensión existencial a otra, es decir, podrían hacerse visibles a nuestros ojos a voluntad. Y, por último, estos seres, podrían ser hostiles, amigables o indiferentes hacia nosotros. De esta forma nos podríamos encontrar con dioses buenos y malos, ángeles, demonios y aliens buenos y aliens malos. Mejor dicho, existiría toda una gradación de intenciones de estos seres con respecto a la especie humana que pudiera ser muy reveladora y que explicaría muchos puntos oscuros de nuestra historia y de nuestra vida actual.